Llegó el momento de irme
con lágrimas saladas,
de puro mar en los ojos.
Meditando los pasos dados,
cansados, lentos, torpes,
pasos de quien ya espera poco.
Instantes de luz
entre tinieblas.
He visto crecer la luna
paso a paso, noche a noche
pero sin tí.
Más pronto que tarde,
volveré, sí volveré,
con deseos de sol y de agua clara.
Me revolcaré en las nubes
volaré con ellas, lentamente
huyendo del temporal que se avecina
y cerca de ellas veré la luna
una vez más, contigo
a tu lado,
donde me siento mejor
todos los días.
No hay comentarios:
Publicar un comentario